miércoles, 25 de enero de 2012

La pesadez de autoafirmarse

Abrumadora pereza. Venga. Otra vez. Artur Mas ha alertado de que "el pueblo de Catalunya debe prepararse para actos de autoafirmación, que quizás romperán un poco las costuras de la Constitución y el Estatuto, muy rígidamente interpretados."




El ansiado pacto fiscal nubla los ojos. El espíritu Braveheart planea desde hace tiempo. Se arenga a las masas y se suceden las encuestas una tras otra a ver si se ha arrancado alguna décima y podemos abordar una consulta que nos dé el resultado que queremos. Como en Quebec, vamos. Una consulta tras otra y a ver si así, algún día, quizás...

Lo que debo admitir que me ha sorprendido ligeramente -no demasiado, pero sí en cierto modo- es que el Molt Honorable estuviera tan encantado con esta situación. Con el tira y afloja permanente, que ya iniciara su predecedor convergente, pero cuya cuerda flojeando ya por todas sus costuras. Peligrosísimo camino el escogido, si me permiten los señores de CiU. Peligroso y con letales consecuencias. Y será, mucho me temo, tarde, para cuando se hayan dado cuenta.

Los caminos que el sr. Mas define como "caminos de autoafirmación de país" son agotadores. Y más todavía cuando siguen confundiendo a su partido, a la Generalitat y a Cataluña como si de una misma cosa se tratara. Y eso, es todavía más peligroso. Porque siempre olvida que hay  quienes amamos a nuestra tierra sin necesidad de "autoafirmarnos", que bastante trabajo tenemos con nuestra lucha diaria.

Olvidan también que hay más de una manera para querer a tu tierra. Y que no se la quiere menos por desear verla integrada en un gran proyecto español, como parte esencial del mismo, desde la lealtad y la colaboración mutua. Porque Cataluña ha sido muy grande. Y lo ha sido junto con el resto de España.

Y eso, que para algunos de vosotros será de una obviedad manifiesta, es -creedme- tremendamente complicado. Ya lo voy diciendo desde hace tiempo. Estoy exhausta. Pero lo peor es que me da una pereza brutal, que es -en mi caso- mucho más preocupante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario