Tras la presión y el acoso de no pocos medios, Francisco Camps ha decidido presentar su dimisión como President de la Generalitat Valenciana.
¿Mi opinión al respecto? Más allá de la gravedad de los hechos que se le imputan ha hecho lo correcto y sobre todo, desde un punto de vista estético, necesario. Así, Mariano Rajoy respira más tranquilo con un tema menos agolpado en la mesilla de noche.
Ahora bien. Siguen estando más claras que nunca las dos varas de medir de este tipo de hechos según sea el color político del imputado en cuestión. Y francamente, a pesar de que parece que ha mentido en el Parlamento, los hechos que se le atribuyen -a pesar de ser condenables si se demuestra- no son comparables a los que están encima de la mesa de no pocos responsables políticos.
Mucho más grave es mentir sobre un "chivatazo" a un miembro de ETA y aquí paz y después gloria. Pero en fin, no quiero entrar en el "y tú más". Así que bien.
El otro problema que veo es el asunto de la "reinserción" política. En el mundo anglosajón, se dimite con mucha más celeridad pero la posterior rehabilitación, si se ha probado la inocencia o simplemente se ha pagado la culpa, no presenta el más mínimo problema.
Es de todos sabido que en España, una vez fuera del manto calentito de la política es francamente difícil regresar a ella. Y todos lo saben. Por eso se resisten tanto.
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