Ayer almorcé con Esperanza en Wakathai , en el número 13 de la madrileña calle Conde Duque. Interesante mezcla de sabores del sudeste asiático con cocina peruana.
La cocina Nikkei (fusión japo-peruana) está más extendida, pero en Madrid están empezando a proliferar desde hace ya un tiempo los establecimientos de influencia peruana con sabores más genéricamente asiáticos. Me ha apetecido presentarlo porque se trata, además, de un concepto mucho más asequible que el resto de excelentes establecimientos de los que disfrutamos en la capital, de los que seguro también comentaremos en algún momento.
Muy apetecible y con una textura muy agradable la Causa limeña, los tiraditos de lubina y el pollo salteado con mango y anacardos. El local, diminuto y simpático. El personal, con ganas de agradar. Me cayeron bien. Sin pretensiones y cómodo.
Para una cenita informal o para comer con una amiga o amigo con quien charlas "a calzón quitado" -para utilizar castiza expresión- se trata de un espacio acogedor y próximo a uno de los puntos culturalmente calentitos de Madrid.
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