El Ministro del Interior está convencido de que Tomás Gómez habrá medido las consecuencias de presentarse a unas elecciones primarias. Apunta, asimismo, del riesgo que existe al decir “no” al secretario general.
Alfredo Pérez Rubalcaba nos tiene acostumbrados a su manejo del florete, dejando la navaja bien afilada bajo la almohada de Pepiño Blanco. Pero en esta ocasión, el aviso no oculta la amenaza visualizada en un oscuro callejón.
Las consecuencias a las que se refiere el Ministro, por mucho que uno las haya podido medir, serán las que serán. Lo veremos. Pero sin duda, las medidas y el peso que han quedado al descubierto son las suyas propias. Y si yo fuera Gómez, me aseguraría de coserle los bolsilllos de su traje.
El espíritu de este cuaderno digital no es otro que el de reunir ideas,pensamientos,gustos cinematográficos o gastronómicos,lecturas estimulantes o viajes sugerentes.Me interesa todo aquello que tenga que ver con el ámbito social y político,me interesa la libertad y su búsqueda permanente,me interesan las diferencias entre la óptica femenina y masculina,me interesan,en definitiva,las personas y su encaje en una sociedad cada vez más compleja.Y me apetece contarlo en mi propio espacio.
Todo este tema de las primarias en el PSOE madrileño me tiene muy descolocado, porque cada vez que hacen declaraciones los "supuestos enemigos" del hasta hoy Secretario General del PSM, este gana en popularidad, lo cual era su gran handicap.
ResponderEliminarSabiendo que los socialistas son unos expertos en el arte de no dar puntadas sin hilo puede ser que hasta los que creemos que son contrarios a Tomás Gómez están a su favor.
En definitiva, que a Tomás y no digo más, no le conocían ni en su casa, y ahora es mucho más conocido que algún ministro...
Pues no te falta razón IJA... Si así fuera, nos tendríamos que rendir ante esta vuelta de tuerca maquiavélicamente magistral...
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