La ONU ha reconocido las 500 violaciones de niñas y mujeres llevadas a cabo entre julio y agosto en el Congo. Admite el organismo internacional sus "errores" al producirse éstas a tan sólo 30 kilómetros de su base.
El representante especial de las Naciones Unidas para la región, Roger Meece apuntó que, a pesar de ser conocedores de la presencia en la zona de guerrilleros Mai-Mai y de las Fuerzas Democráticas para la liberación de Ruanda, no tuvieron conocimiento de ninguna intención de ataque a la población civil. Como si los numerosos precedentes no sirvieran para algo.
Quizás los extensos y largos nombres de los cargos que ostentan muchos de los responsables de la Organización estén distrayendo su atención de lo verdaderamente importante, más allá de sus abultados sueldos. Y es velar por la seguridad y el bienestar de miles de seres indefensos -en su gran mayoría, mujeres- que no sólo tienen que enfrentarse a la miseria, sino a los ataques brutales y despiadados de guerrilleros sin escrúpulos, de los que algunos de sus dirigentes campan a sus anchas por establecimientos parisinos.
Y mientras, los "cascos azules" estarían acariciando..... los cascos. Pues eso, de vergüenza. Y mucha indignación.
El espíritu de este cuaderno digital no es otro que el de reunir ideas,pensamientos,gustos cinematográficos o gastronómicos,lecturas estimulantes o viajes sugerentes.Me interesa todo aquello que tenga que ver con el ámbito social y político,me interesa la libertad y su búsqueda permanente,me interesan las diferencias entre la óptica femenina y masculina,me interesan,en definitiva,las personas y su encaje en una sociedad cada vez más compleja.Y me apetece contarlo en mi propio espacio.
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